¿Te gustan las chicas en la ducha? Entra en mi sala webcam y me ducharé solo para ti

Estás solo en casa y necesitas ponerte a tono. Siempre te ha gustado mirar allí donde está prohibido y ver, por ejemplo, a las chicas en los baños. Es algo que te pone muy cachondo, y es normal, porque seguro que el deseo que sientes en ese momento es bestial. Pues ahora podrás espiarme a mí, en mi pequeña ducha particular, sin salir de casa. Te ofrezco la oportunidad de que espíes mi intimidad mientras me baño, mientras me relajo y me dejo llevar por el agua y el jabón.

Soy una chica muy sucia y por eso tengo que bañarme todos los días, siempre con la compañía de los viciosos ojos de mis chicos al otro lado de la pantalla. Coloco mi cam frente a mi ducha y dejo que la magia fluya, porque me lo paso en grande sabiendo que al otro lado hay un montón de hombres deseosos de verme desnuda, de ver cómo juego con mi cuerpo, con mis curvas, cómo me masturbo… Los límites los pones tú, porque al final, eres el que manda en cada momento.

Puedo hacer lo que me pidas

Estoy aquí para cumplir tus deseos y fantasías más morbosas, y por eso estoy segura de que todo lo que haré ante la cámara te encantará. Mírame mientras me desnudo, mientras me preparo para tomar mi baño diario. Lo haré con tranquilidad, para que te deleites con la visión de mi cuerpo, para que puedas reconocer cada centímetro de mi piel. Y lo haré pensando en ti, mirando fijamente a la cámara, como si estuvieras aquí realmente, aunque haya una pantalla que nos separe. Todo lo que tú me pidas lo cumpliré, porque seré tu gatita morbosa y obediente, para que vivas los momentos más viciosos que puedas imaginar, sin siquiera salir de tu habitación.

Me encantan las duchas calientes

No es solo por higiene, es que me encanta disfrutar de mi cuerpo en la ducha, dejando que el agua se lleve todo lo que me limita o lo que puede suponer un tabú, y atreviéndome a llegar mucho más allá con la esponja y los dedos… Me encanta sentir el calor del agua bajando por mi cuerpo, esculpiendo mis curvas, cayéndome sobre la cara y limpiando todo lo que debe limpiar, mientras yo me vuelvo cada vez más sucia y dejo que mis dedos reconozcan mis partes más ardientes, cerrando los ojos, dejándome llevar.

Creo que a todos nos encantan las duchas calientes, pero yo tengo especial predilección por ellas, porque son mi momento favorito del día, cuando puedo olvidarme del resto del mundo y relajarme… Aunque siempre tengo en cuenta a mis chicos, a los que están mirándome a través de una pantalla, porque mi cam siempre está colocada en el mejor lugar posible para captarlo todo con el mejor ángulo y la calidad que requiere un baño así. No te perderás un solo detalle, te lo aseguro.

Puedo ducharme con juguetes eróticos

A veces me gusta ducharme con el gel, el champú y la esponja, nada más, pero siempre suelo tener cerca mis juguetes favoritos, por si la cosa se anima. Y es que entre el agua cayendo, la humedad, el calor y el sabor que hay un montón de hombres mirándome, muchas veces me vengo arriba y empiezo a tocarme para darme placer. Mis dedos son ágiles y saben moverse muy bien por ahí abajo, pero tengo además algunos juguetitos especiales que hacen que el placer llegue aún más allá, y desde luego que no me importará utilizarlos llegado el caso. Si te gustan esos juguetitos solo tienes que decírmelo, para que yo pueda ponerme manos a lo obra con ellos.

¿Qué otras fantasías quieres que cumpla?

Estoy a tu completa disposición para que cumplas esas fantasías locas y morbosas que siempre tienes en mente y que parece que las chicas con las que has estado no saben o no pueden hacer. Si son fantasías muy morbosas y calientes, seguramente tengas que buscar a una buena profesional para cumplirlas. Pero para eso estoy yo aquí, que llevo ya muchísimo tiempo en esto de ser webcammer y sé cómo satisfacer a mis clientes, a los que están siempre al otro lado, esperando la pasión más salvaje por mi parte.

Tú eliges lo que yo puedo hacer, si prefieres verme con juguetes o con la simple habilidad de mis manos, si quieres que me ponga aceite en mis tetas o prefieres comprobar cómo me abro el culo con alguno de mis juguetitos. Un striptease morboso con la música que más te guste, una buena mamada a algún consolador mientras sientes que estoy allí contigo, dejándote seco con mis labios… Aquí no hay límites, así que no te cortes y proponme lo que quieras.